Esta mañana he presenciado una escena que me ha dejado
pasmado, indignado y triste por la violencia que llevaba aparejada.
Estaba a punto de cruzar la avenida de las Piletas, en la
zona que he pintado en rojo en la foto, cuando viene un coche y se para
dejarnos pasar a las personas que estábamos en el paso cebra. En ese momento
aparece detrás del coche una moto a toda velocidad y adelanta al coche sin
pararse. El conductor del coche toca el claxon a la moto por la maniobra que ha
hecho, pero tampoco lo hace de una forma exagerada, solo toca una vez y además
no le dice absolutamente nada.
En ese momento pudimos ver como el conductor de la moto, que
ya había andado diez o doce metros, se vuelve a toda velocidad, se acerca a la
ventanilla del conductor del coche y a gritos le dice:
- Que quieres ostiao. No ves que tenía sitio para
pasar. A que te doy un puñetazo en toda la cara, subnormal. Un tiro, un tiro te
voy a dar.
Al conductor del coche no le escuché responder absolutamente
nada, sino que cuando los que estábamos allí pasamos la calle siguió para
adelante, pero todavía el de la moto, que se había quedado atrás, al
adelantarle le dio una patada al coche y según me dijo otra de las personas que
estaba, le arrancó el espejo retrovisor, metiéndose por la calle de la
izquierda.
Como pueden imaginar todos los que estábamos allí, cinco o
seis personas, estábamos que no entendíamos nada ante tanta violencia
innecesaria.
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