Ayer les contaba como una circunstancia en forma de virus nos ha hecho
cambiar toda nuestra vida, volverla como un calcetín. Tanto que hasta
hemos tenido que acostumbrarnos a los cambios de nombres de algunos productos, que
no sé porque algunos gilis han decidido cambiar, así lo que hasta hace poco era
un limpiador de manos, hoy lo llamamos, o lo han renombrado algo así como Hidroalcolico, y no sé porque
tengo la sensación que ese cambio de denominación se debe simplemente al deseo
espurio de los fabricantes y vendedores de cobrarnos dos o tres euros más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario